En julio de 2018, la estrella del pop, Demi Lovato, fue encontrada inconsciente en su mansión de Hollywood Hills, después de estar de fiesta toda la noche.
Demi, cantante, compositora y actriz de 25 años, estaba celebrando el cumpleaños de un amigo en Saddle Ranch en Los Ángeles, pero TMZ informó que más tarde regresó a su casa con amigos, donde continuó la fiesta.
Cuando los servicios de emergencia fueron llamados alrededor del mediodía del día siguiente, ninguno de los juerguistas que asistieron a la fiesta en la mansión de Demi estaban allí.
Demi fue encontrada colapsada en su casa y llevada a un centro médico en Los Ángeles. Se cree que los médicos la revivieron con Narcan, un medicamento de emergencia que se usa para revertir los efectos de las sobredosis de drogas.
Un portavoz de la cantante confirmó más tarde, que estaba despierta y contando con el apoyo de sus seres queridos.
Cinco semanas antes, Demi se veía saludable y alegre en una brillante publicación en las redes sociales, allí expresó que se sentía: «Feliz y libre«.
Desde entonces, el sitio web de TMZ ha publicado un informe en el que se alega que posteriormente a estos hechos, Demi volvió a consumir drogas.
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Los Rumores
El 21 de diciembre de 2018 Lovato decidió finalmente romper el silencio y callar los rumores en las redes sociales y medios de comunicación, publicando en Twitter lo siguiente:
“Si siento como que el mundo necesita saber algo, lo haré yo misma. Gente, dejen de escribir sobre mi recuperación, el asunto no es de nadie más que mío. Estoy sobria y agradecida por estar viva y poder cuidar de MI”, escribió la artista.
En otro post también escribió: “Soy muy afortunada de poder tomar este tiempo para estar con mi familia, relajarme, trabajar en mi mente, cuerpo y alma, y regresar cuando esté lista”.
Los medios de comunicación, señalaban Lovato, presuntamente consumía heroína. Sin embargo, se confirmó que en su cuerpo habían restos de una sustancia llamada fentanilo, la misma droga que mató a Prince.