MDMA, también conocida como éxtasis o molly, es una droga psicoactiva sintética que afecta tres sistemas de neurotransmisores en el cerebro: serotonina, dopamina y norepinefrina. Aunque no hay una gran cantidad de estudios centrados en la dependencia de MDMA, las que se han realizado, ilustran claramente la naturaleza adictiva de la droga.

Las ratas de laboratorio han demostrado que la MDMA daña las neuronas que contienen serotonina y, a veces, el daño es prolongado. Los adictos a la MDMA experimentan tolerancia a la sustancia y síntomas de abstinencia cada vez mayores como la fatiga, la pérdida de apetito, depresión e incapacidad para concentrarse.

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